Tecnología, materia prima y personalización: la clave de nuestros empaques
La efectividad de nuestros empaques es un conjunto de dos factores de gran importancia. En primer lugar, la adecuada elección de la materia prima: en nuestro caso, la espuma de polietileno.
Y en segundo lugar, se trata de la aplicación de tecnología de primer nivel, que permite el diseño y producción de empaques personalizados al producto de cada cliente.
Seguí leyendo y te contamos un poco más sobre los empaques de Ironpack.
La espuma de polietileno permite reducir el scrap o residuo. Es decir, en el diseño del packaging, se emplea la cantidad necesaria, de modo que al desembalar el objeto, el resto a desechar es mucho menor. Esto no sólo se traduce en menores costos sino también en menos contaminación por la generación de basura.
Además, el empaque también está enfocado en la experiencia del cliente: se evitan los refuerzos innecesarios y el material sobrante. De este modo, al cliente le resulta fácil y sencillo acceder al producto, sin perder tiempo en intentar abrir el paquete.
Por otro lado, también ofrece como ventaja su propiedad de ser resistente. Ésta no cederá ni se deformará en un largo plazo, por lo que cumple perfectamente la función de ser protección. Cada decisión en diseño está alineada en torno a dicho objetivo.
Un empaque para cada producto
Por último, mediante un estudio previo del producto a proteger y sus características, garantizamos la personalización del empaque. Trabajamos sobre una muestra, que perfeccionamos en caso de que sea necesario. Al contar con tecnología de avanzada, no trabajamos con matriz o con modelos fijos, sino con las necesidades de cada cliente que llega.
